top of page

SUPLICIO ORAL


Su húmeda serpiente

danza desde su melódica caverna,

se arrastra en medio de mis piernas

para inyectarme su veneno alucinante.

Voy muriendo en instantes,

y aún con la falta de aire,

se desbocan mis gemidos,

tengo la opción de frenar su ofensiva,

pero no quiero que se detenga el suplicio.

Merezco el castigo de su hambre

por permitir que su húmeda serpiente

incitara a mi piel al pecado de la carne,

se arrastró desde mi boca, a mi cuello,

a mi espalda, por mi trasero,

hasta provocar la humedad abundante.

Y ahora que se arrastra

por las paredes de mi sex_0,

no tengo otra opción más que morir

en las llamas que su apetito

no sabe disimular ni en su aliento.

Me chupa, me come, me lame,

de su gula erótica yo tengo hambre,

¿y es que parar como?

si el orgasmo está al borde,

en su húmeda serpiente exploto,

lo quiere todo,

y yo se lo doy de manera abundante...

Autor:

M. Castaneda


3 visualizaciones0 comentarios

Entradas relacionadas

Ver todo

Uff...

Mi Sr.

bottom of page